sábado, 18 de mayo de 2013

Sobre emociones, sensaciones: A propósito de las Santas de Zurbarán

¿En qué consiste el arte? ¿Es arte todo aquello que nos emociona? ¿Qué capacidad de conmover o de transmitir tiene una obra de arte? ¿Se puede seguir generando belleza a partir de la creación artística del barroco en la actualidad? ¿Puede Zurbarán seguir propiciando emociones y generando sensaciones como las que transmitía en el siglo XVII? Todas estas preguntas intento plantearlas en la exposición Santas de Zurbarán. Devoción y Persuasión. Más que una exposición es una nueva apuesta de seducir al público intentando interactuar con sus sensaciones al contemplar la imagen sagrada de estas santas y la forma de recepción de la misma por parte del público. ¿Es una santa virgen o una dama mundana? Lo humano y lo divino confundiendo al espectador, y de esa confusión nace la creación a partir de la inspiración que generan las santas de Zurbarán en nuestros diseñadores actuales. La exposición por tanto es una llamada a todo el público a iniciar un viaje por el proceso creativo partiendo del impacto que genera en otro creador la concepción del cuerpo femenino de Zurbarán. Cristóbal Balenciaga lo tuvo muy presente e intentó acercarse a construir formas en torno al cuerpo de la mujer como si de una arquitectura se tratara. Lo expone Javier González de Durana en su texto del catálogo de la exposición. Ambos artistas renuncian a lo sexual para potenciar lo sensual. La mujer como heroína, como modelo de virtus que potencia la elegancia con unas telas que enmascaran su cuerpo y potencian, en cambio, su presencia. Es ese sentido potente, escultural, eterno el que se ha querido subrayar en esta exposición gracias al montaje que ha realizado GPD, que intenta en todo momento subrayar el discurso de la devoción y la persuasión interactuando con los visitantes, gestionando sus propias emociones y conduciéndoles por una senda que los transporte a un mundo soñado en el que se confunda la realidad con la visión, la aparición con la creación. Porque es un viaje que conlleva a valorar la belleza, a crear otro tipo de sensaciones que atemperen el dolor y potencien lo bello. De lo bello a lo sublime. En un mundo y en una sociedad que busca lo banal, lo zafio, lo burdo no está mal reivindicar el triunfo de la belleza de lo diferente que nos hace más fuertes y nos tiende una mano a la esperanza. Porque solo con la cultura, con la creación y con el triunfo de lo sensible podremos construir un mundo mejor en el que la demanda de otros valores sean lo verdaderamente deseable porque decir cultura, como dice Umberto Eco, es decir crisis, y de estas situaciones surgen y emergen los verdaderos valores.

2 comentarios:

Carmen dijo...

Tuve la suerte de asistir ayer Domingo a tu conferencia sobre SAntas, del Taller de Zurbarán. Me encanta el arte y creo que eres una de las personas que más sabe de patrimonio y en este caso de Zurbarán. El próximo domingo visitaré la exposición y estoy segura que mi visita se verá reforzada con tu maravillosa conferencia. Gracias y un abrazo, Carmen

Benito Navarrete dijo...

Muchas gracias Carmen. Mensajes como estos son los que me animan a seguir estudiando y compartiéndolo con vosotros.